Es verdad que yo, personalmente, jamás me planteé moverme por mi ciudad en moto y con mis hijas, pero ahora veo a mi hermano y su mujer, que con 40 años y dos hijos han decidido abandonar el coche e ir a una tienda de motos, de hecho se han comprado dos scooter de segunda mano.
Me sorprendió pero las explicaciones que me dieron me parecieron de lo más acertadas en estos tiempos.
No solo aparcar un coche es complicado hoy en día en las grandes ciudades sino que, además, hay que pagar el servicio de estacionamiento regulado o parking en su defecto, y encima en estos momentos “menudo precio tiene el combustible”, y ya ni hablar de los atascos.
¿Pero tendrás que pagar igualmente por aparcar la moto?, le dije. Y ahí va lo mejor de todo: “ No, para las motocicletas y ciclomotores de dos ruedas, es totalmente gratuito el estacionamiento en las zonas de estacionamiento regulado”.
Con todos estos pros, mi hermano ha vendido el coche hace unas semanas y se fue a una tienda de motos a comprar dos scotter de segunda mano para llevar y traer a mis hijos, dijo. Para los viajes largos nos compensa el alquiler de un coche, me dijeron, ¡sale hasta más económico que tener un en propiedad!. Para ellos ha resultado lo más cómodo y transportan a sus hijos en la moto. Uno lleva al mayor al instituto y otro, a la más peque, y de ahí, cada uno a su trabajo.
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Pero… ¿es seguro y cómodo transportar a los niños en moto? Sí, si se tiene en cuenta todos estos aspectos que he buscado y que ayudan en la seguridad de nuestros hijos/as:
.- Importante conocer a partir de qué edad podemos transportar a nuestros hijos/as en moto y las condiciones que se requieren. Pues bien, la Ley dice que siempre tiene que tener el menor 12 o más años y excepcionalmente a partir de los 7, mientras que quien conduzca la moto sea el padre, la madre o el tutor del menor o persona mayor de edad previamente autorizada por ellos.
.- La moto tiene que estar homologada para llevar a un pasajero. ¡No lo olvides! Las multas están por encima de los 200 euros.
.- Protege a tu hijo/a con un casco adecuado, es decir que sea de su talla, que te asegure la seguridad del menor. Comprueba siempre que no es grande, balanceando por ejemplo su cabeza, que esté pegado a la misma.
.- La posición es fundamental. Tu hijo/a tiene que ir a horcajadas, en el asiento trasero (nada de llevarlos delante como en los años 70 porque aunque creamos que es más seguro y que los protegemos mejor, es un grosso error), con los pies apoyados en el reposapiés laterales (debe llegar a las estriberas de la moto) y que el niño/a se agarre siempre a los laterales del cinturón del adulto.
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.- Ser precavidos y asegurarnos siempre de la posición y medidas de seguridad de nuestro hijo/a antes de iniciar la marcha.
.- Se recomienda incorporar a la motocicleta un soporte de apoyo a la espalda para mejorar la seguridad y la sujeción.
.- Llevar siempre al menor con la vestimenta adecuada: pantalón largo, calzado adecuado, guantes y chaquetas con protecciones.
.- Viajar a velocidad moderada y procurar que sean vías interurbanas. Con menores se recomienda solo transportarlos en ciudades. Como conductores, tendremos siempre que acelerar o frenar de manera suave.
.- La mochila… nunca a la espalda del menor, podría desestabilizarlo.
.- Por último, ojo con el tubo de escapa a la hora de que el menor suba o baje de la moto. Es mejor que nosotros le ayudemos.
Y con todo esto, y más ahora que nuestras ciudades están mucho más adaptadas al transporte alternativo como motos, bicicletas, patines eléctricos, a mí, porque me pilla tarde, ya que mis hijas son mayores, porque sino también me pasaría a una scooter. Pero… quizá sea una buena opción para ellas… ¡Lo hablaremos!
