Laura Puerto, es madre de dos hijos y un buen día, después de haber pensado que no contaría nada de su aventura de ser madre, decidió que lo contaría todo, para ayudar a otras mujeres, a que no sintiesen solas, ni diferentes. Su libro, “Plantando cara a la fertilidad”, es todo un éxito.
Entrevista: Rosa Maestro @rmaestrom @Masola_Org
#Lahistoriacomienza cuando inicié la aventura de buscar un bebé; entonces tenía 29 años, aunque realmente mi historia con la #infertilidad la empecé a los 22 años.
Fui a hacerme mi primera revisión ginecológica, y salí de allí con unos ovarios que para mi ginecóloga no valían nada. Después de hablar con un colega suyo delante de mí de una “cosa muy grande” que había que quitar sí o sí, me explicó que tenía #endometriosis.
Me propuso quedarme embarazada, y después quitarme los ovarios. Tenía 22 años y novio desde hacía seis meses… ¿qué locura me estaba proponiendo? (Que por cierto, este chico me dejó quince días después, cinco días antes de que me operasen. ¡Como para ser el padre de mis hijos!).
Visto lo visto, me fui a pedir una segunda opinión a una clínica privada. Allí me confirmaron que sí, que tenía una endometriosis severa, pero que se operaba y punto.
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Quince días más ya estaba operada, con mis ovarios en su sitio, y como todo había ido tan bien, y me habían dicho que por supuesto que podría tener hijos, me fui de allí con una idea muy equivocada de lo que me costaría en un futuro ser madre.
#Cómomesentí cuando quise tener hijos.. ni tan sencillo, ni tan fácil. Sentí miedo, cuando me dieron los resultados de las primeras pruebas, y nos dijeron que teníamos que recurrir a la fecundación in vitro para ser padres. Sí, sentí miedo, frustración, vergüenza…
Como si fuese algo malo de lo que me tuviese que avergonzar, o como si fuese una mujer defectuosa al no poder tener hijos de forma natural. Y también me sentí muy sola.
En mi entorno cercano no había nadie en mi situación, y aunque mi familia me intentaba apoyar en todo, no podía evitar sentir esa soledad.
#Loquedecido es en un principio que no se lo contaría a nadie. Lo sabrían mi marido, mi madre y yo. No lo iba a compartirlo ni con mi hermano, al que adoro y con el que no tengo secretos. En aquellos momentos me sentía una mujer defectuosa, y un bicho raro.
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#¿Cómosigo? Buscando por Internet, encontré un foro con chicas que estaban sufriendo la infertilidad, como yo. Y decidí participar. Y posteriormente me uní a otro grupo de mujeres por twitter.
Fue una de las mejores decisiones que tomé. Hablar a diario con mujeres que sabían exactamente lo que estaba viviendo supuso un soplo de aire fresco. Cambié totalmente mi actitud.
Dejé de sentirme un bicho raro, dejé de avergonzarme de ser infértil, y me dieron gran parte de la fuerza necesaria para compartir con mi entorno mi infertilidad, para afrontar tres FIV (fecundaciones in vitro) negativas, una nueva operación de mi endometriosis, y la ovodonación final que me trajo a mis niños.
#Loqueaprendí durante todo este proceso es que soy más fuerte de lo que pensaba, y también que puedes llorar las penas y celebrar las alegrías de personas que no conoces, pero con las que compartes un mismo sueño.
#Ahoraestoy viviendo la etapa más bonita de mi vida. Una etapa de recompensa después de tanta lucha, en la que por fin, mis niños encontraron el camino para llegar hasta mí.
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#Yvoyhacía un camino maravilloso en el que me encantaría poder ayudar a otras chicas que están peleando en estos momentos con la infertilidad, y que puedan sentir y vivir lo que estoy sintiendo y viviendo yo.
Hacer que no se sientan solas, y transmitirles que aunque el camino sea duro y agotador, siempre merece la pena luchar por un sueño. Ese es el motivo por el que decidí relatar mi historia en un libro ‘Plantando cara a la infertilidad’, y posteriormente unirme a la Asociación Red Nacional de Infértiles.
Laura Puerto estará en próximo 23 de febrero en @ImpactHubMAD para hablarnos de los test genéticos y el posible fin del anonimato de los donantes de gametos.