No dejó de leer, de oír y de ver constantes críticas de madres a madres, de mujeres a mujeres.
Perfectas todas en nuestra maternidad nos atrevemos a juzgar a las demás en aras a esa socialización religiosa que tanto daño a hecho a la mujer.
A modo de ejemplo os dejo una de las muchas reliquias que la Biblia, e imagino que otros libros religiosos (los que más han discriminado, humillado e insultado a la mujer) con las que se nos ha adoctrinado: “Porque Adán fue formado primero, después Eva; y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en trasgresión. Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia.”
Qué lejos debe estar la religión y la fe de unas escrituras manipuladas. Manipulación que llega hasta nuestros días y somos nosotras, y no ellos, quienes aún tatuadas en esa culpabilidad juzgamos duramente a la mujer que se siente mujer después de ser madre.
Y ahí estamos preguntando una y otra vez a una mujer por qué no es madre, intentando sonsacar que es porque tiene problemas, como si su decisión de no serlo no tuviese credibilidad dentro de su cuerpo femenino.
Juzgamos a aquellas que no se dedican en cuerpo y alma a sus hijos (pero no a los hombres), que no viven solo para ellos olvidando casi a sus parejas, a aquellas que no dejan de ser mujeres para ser madres, a aquellas que si viven, disfrutan, sienten, aman, se apasionan y hablan de otros proyectos que no sean la maternidad.
A aquellas que no mencionan a sus hijos cada cinco minutos como si el nombre del hijo tuviese que ser el primero siempre a pronunciar…
A aquellas que desean volver a ser mujer después de parir, de volver a sentir, de volver a enamorarse, de volver a sentir pasión, viajar, proyectar, trabajar… Porque además estas son las madres que llegado el momento sabrán que sus hijos no les pertenecen, pertenecen a la vida y les permitirán vivir igual que vivieron ellas sus vidas y no las vidas que los demás imaginaron para ellas.
No, yo soy una apasionada de las mujeres que son mujeres por encima de todo y aman a sus hijos, sus parejas, sus trabajos, sus proyectos, sus amigos, sus pasiones, sus ocios….
No, no me gustan las madres que son una declaración del propósito divino.
Leer más: "Porque así lo decidí"
Leer también: "No te quejes"
Leer también: "Cansadas del tú lo has elegido"
![1star](https://masola.org/wp-content/plugins/all-in-one-schemaorg-rich-snippets/images/1star.png)
![1star](https://masola.org/wp-content/plugins/all-in-one-schemaorg-rich-snippets/images/1star.png)
![1star](https://masola.org/wp-content/plugins/all-in-one-schemaorg-rich-snippets/images/1star.png)
![1star](https://masola.org/wp-content/plugins/all-in-one-schemaorg-rich-snippets/images/1star.png)
![1star](https://masola.org/wp-content/plugins/all-in-one-schemaorg-rich-snippets/images/1star.png)