¡Como me gusta el punto!, tejer ropa de bebé con dos agujas. Desde pequeña mi abuela me enseñó a tejer mis propias bufandas, gorros, ponchos… “Empieza haciendo cadeneta”, me decía, y me tiraba días haciendo cadeneta. Luego dejé de tejer, ¿por qué?
Nuestro ritmo de vida no nos lo pone fácil y no da tiempo a todo. Si tejo no leo, y ahora casi prefiero leer, pero no puedo evitar que me siga enamorando la ropa hecha a punto, se me van los ojos cada vez que veo una prenda y si es de bebé, ya me quedo pegada al escaparate.
Claro, que hay muy pocas tiendas de bebé con prendas hechas a punto pero… El otro día cotilleando por internet di con una tienda Condor de prendas para bebés espectaculares.
Calcetines, leotardos, pantys, chaquetas, ropa para ceremonia y hasta un precioso pantalón bombacho de bebé niño, ¡Qué cucada de ropa!, que diría mi abuela.
Y son tan parecidos a los que ella tejió para todos nosotros. Diez nietos tuvo y ni uno dejó de ir con sus calcetines de punto y sus chaquetitas a juego.
Pues bien, yo soy consciente que nuestro modo de vida poco tiempo nos deja como para ponernos ahora a aprender a hacer punto, pero, ¿para qué?, si ahora en tiendas online podemos comprar y regalar una prendas que van a enamorar a todas las madres y padres.
Y ya si se avecina un evento familiar como una boda, comunión, bautizo o un porque sí, ahí vas a triunfar comprando una de estas prendas tan delicadas como bonitas.
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Ya, sé que igual eres de las que estás pensando que esto del punto está pasado de moda y que nada como una prenda de algodón, cómoda e higiénica; pues he de decirte que el punto nunca pasa de moda, todo lo contrario, es un valor al alza porque el punto siempre ha sido un tejido estrella (el estilo se actualiza) y que los bebés, los niños siempre han ido vestidos de punto, por su comodidad, calidez e higiene.
Es transpirable y reduce las alergias cutáneas. Además permite utilizar desde la lana, el algodón, fibras acrílicas y otros materiales textiles.
La dermis de los niños pequeños y sobre todo de los bebés es muy delicada y necesitan, sobre todo en verano, estar fresquitos y llevar prendas que evite rozaduras e irritaciones.
Pero, además, de todas estas ventajas que se nos han ido olvidando con la llegada de la ropa de consumo rápido y para dos o tres lavadas, empezamos a darnos cuenta de lo valido que era ese mundo de las abuelas.
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Una prenda a punto es muy suave al tacto y se adapta a la movilidad del bebé; son prendas muy versátiles con una amplitud de diseño para todos los momentos.
Otro mito es que son tan delicadas que con un lavado ya pierden color, textura… Todo lo contrario, el punto aguanta muy bien el lavado y se mantiene en el tiempo mucho mejor que algunos de los tejidos actuales.
Y a este mito le añadimos el de que solo son para el invierno. Pues no, la primavera y el verano son estaciones ideales para vestir a nuestros peques de punto.
¿A qué esperas? Date una vuelta por el mundo online del punto para vestir a nuestros bebés.