Eslovenia, un viaje para disfrutar de la naturaleza en familiaNo estaba en nuestros planes, no era a la primera persona que le oía hablar maravillas de Eslovenia. Así que con tiempo me puse manos a la obra y comencé por buscar y reservar todo (ya sabéis que con meses de adelanto todo es más barato y que hoy en día en Internet hay muchos metabuscadores que te permiten cancelar hasta unos días antes).
Rosa Maestro @rmaestrom @Masola_org
Lo primero que vimos es que los vuelos a Liubliana, suelen ser difíciles de encontrar y caros, pero no a Venecia, ciudad italiana que cuenta con bastantes frecuencias diarias y a dos horas y media de la capital eslovena.
Venecia, inicio del viaje
Vuelos comprados nos dispusimos a volar hasta Venecia y aunque ya era la cuarta vez que visitaba este deleite italiano, no puede evitar caer en la tentación de disfrutar de un día entero de esta ciudad colorida, romántica, totalmente ambientada y cara, cara, carísima…
En esta ocasión nos limitamos a pasear porque ya lo hemos visto todo varias veces, pero no habíamos callejeado que es lo que deseábamos hacer y abordar una de sus góndolas (las niñas estaban deseando) por el módico precio de 80 euros media hora (!vamos para pensárselo!).
Nos pusimos de pizza hasta el tuétano, helados y crepes…. Aconsejadas por el dueño del Bed and Breakfast en el que estábamos alojadas (siempre reservamos con booking por lo económico de sus precios y por sus facilidades para cancelar casi a última hora), acudimos a un centro comercial de lujo, T Fondaco Dei Tedeschi.
Lo más probable es que no compras nada porque es un centro comercial totalmente de lujo con precios prohibitivos para la mayoría de las personas, pero disfrutarás mucho viendo los objetos y prendas tan maravillosos que allí se exponen.
Claro que lo mejor de este centro comercial no son sus compras, sino su terraza en el piso superior. Las vistas son espectaculares, de una Venecia que invita a fotografiar cada instante como si de postales se tratase. Importante, la terraza solo admite visitas de 15 en 15 personas con lo que hay que reservar la hora en la que la vas a visitar. Os recomiendo por tanto que vayáis a primera hora del día, reservéis, y luego de vuelta.
Leer también: "Eslovenia, la joya escondida de Europa"
De camino a Liubliana
¿Qué cómo llegamos hasta Liubliana? Hay varias opciones, el tren (que puedes reservar con antelación en la web o App de trenes italiana que funciona de maravilla trainline) pero ten en cuenta que solo suele haber un tren a altas horas de la noche y con una duración de casi cuatro horas, lo que hace que la llegada a Liublana sea excesivamente tarde sobre todo si vas con niños.
Otra opción es el alquiler de coches, pero las casas de alquiler suelen poner pegas si vas a visitar otro país: Lo primero que has de saber es que si quieres alquilarlo en Italia y devolver en Eslovenia o Croacia, no puedes.
Según la compañía que elijas, te puede poner problemas a la hora de darte la carta verde necesaria para circular por los Balcanes. Además, si coges un coche de alquiler en Italia el seguro o franquicia no te cubrirá ningún percance que puedas tener en Bosnia; y para llegar hasta Dubrovnik, por ejemplo, hay un tramo en el que se pasa por territorio bosnio*.
Por otro lado, alquilar un coche en Italia suele salir bastante caro. Así que elegimos la opción de trasladarnos desde Venecia a Liubliana con la empresa de transportes GoOpti.
GoOpti funciona muy bien y tienes varias opciones, desde fijar la hora de salida (es más caro) o fijarla con dos horas de margen (te avisan un día antes de la hora de salida exacta), o optar por una ban particular (la opción más cara). Los precios oscilan desde 17 euros a 25 euros por persona y eso sí, tienes que llevar una maleta de 10kilos y una de mano solo, o abonar diferencia por equipaje extra.
Otra opción para llegar a Eslovenia es con el Ferry que sale todos los días desde Venecia con destino a la ciudad costera eslovena de Piran e iniciar el viaje a la inversa. Nosotras supimos de este barco una vez allí, pero desde luego si volviese en verano sería la opción que escogería.
Todo lo que necesitas saber sobre cómo moverte entre Italia, Eslovenia, Croacia y países de alrededor aquí
Ya en Liubliana nos alojamos en el Hotel Central, económico y con un buen desayuno Buffet, pero si hay algo que merece la pena de este hotel es lo céntrico que es. De la puerta al centro de la ciudad.
Liubliana fue una sorpresa, una grata sorpresa. Tropecé con una ciudad sin estrés, donde la vida transcurre lentamente, bucólica, bohemia, elegante, histórica, fría y con mucho encanto.
Es la ciudad más grande del país y es conocida por su población universitaria y sus zonas verdes, como el extenso parque Tivoli. El río Ljubljanica, de formas curvas, está bordeado de cafeterías con terraza y separa el casco antiguo de la ciudad de su núcleo comercial. Paseamos y paseamos y subimos hasta el castillo, caminando, porque merecía la pena. Bajamos en su pequeño funicular acrisolado.
Las vistas de Liubliana son bonitas y el castillo igualmente, pero no son deslumbrantes. Lo deslumbrante está en sus calles adoquinadas, en su río, en sus terrazas con estufa y mantas para cobijarse, en sus restaurantes típicos. ¿Cuáles probamos?
El restaurante Mediterráneo que permitió que los más pequeños le diesen a la pasta y la pizza y los adultos a los platos típicos. Si es recomendable para platos típicos, copiosos y buen precio el restaurante Sokol.
Liubliana me pareció una ciudad de cuento. Me imagino lo maravillosa que puede ser en plena ebullición primaveral o en pleno verano. Muy silenciosa, realmente silenciosa, con pocos habitantes entre sus muros.
25 años de independencia
En 2016, la capital de Eslovenia celebró sus 25 años de independencia respecto a la extinta Yugoslavia. Su guerra apenas duró 10 días, aunque le costó la vida a un centenar de personas, porque inmediatamente fue considerada como país independiente por la UE (Unión Europea) y su ejército se desplazó para luchar intensamente por la independencia croata.
El proceso independentista quedó marcado por una mancha. 18.000ciudadanos yugoslavos residentes en Eslovenia perdieron sus derechos. Fueron borrados de todos los registros del estado. Así se les conoce, como “los borrados”. Perdieron sus derechos, pensiones e incluso ahorros. En la actualidad, las reclamaciones siguen en proceso, con sentencias a favor de la justicia internacional.
Leer también: "Cómo fue la declaración de independencia de Eslovenia a la que mira Cataluña"
Tiene mucho que ver porque es un paraíso de cultura, pero todo depende del tiempo que se disponga para ella. Las guías turísticas son lo mejor para aconsejarse de qué si y de qué no visitar. Si el tiempo es poco, lo mejor es pasearla y pasearla.
En Liubliana alquilamos un coche por la empresa Enterprise que no os recomiendo. Dicen estar en El Centro pero no es verdad, se encuentran en un polígono industrial al que hay que trasladarse en autobús o en taxi, no son especialmente baratos y cargan tasas que no están contempladas cuando se hace por un meta buscador como rentalcars. Mejor con otras empresas de alquiler que están pegadas al centro.
Las cuevas de Postonia y el castillo de Predjama
Y de ahí nos trasladamos a la maravilla de las maravillas. Las cuevas de Postonia y el castillo Predjama, a unos 40 minutos de la capital.
Importante saber que las cuevas son caras y tienen diferentes horarios de visita para combinar las dos cosas y no quedarse sin verlas. La verdad es que he visto muchas cuevas de éstas pero nunca una tan inmensa y tan majestuosa. Merece la pena aunque hayas vista otras muchas (Video Cuevas UNESCO). Las cuevas de Scokjan, que nos quedaban un tanto a desmano, también son espectaculares y si se tiene tiempo no hay que dejarlas de lado.
Precio caro: 27 euros por persona. Nada más entrar te espera un trenecito con el que se recorrerán como unos dos kilómetros observando la grandeza de su mundo subterráneo y luego otro kilómetro andando, de un total de 20 kilómetros de túneles y galerías. Estalagmitas y estalactitas milenarias.
El tiempo de la visita es de una hora y media en adelante. 12.000 luces permiten observar todas las zonas de la cueva, 1.500 sólo para el Gran Salón.
En ella se celebran conciertos, bailes y todos los años un belén viviente con más de 500 personas. Y lo mejor, en ella habita el pez humano, que puede estar más de ocho años sin comer y vive cerca de los 100 años. Y no os cuento más, el resto lo tenéis que descubrir.
El castillo de Predjama, a su vera, está en una ubicación espectacular. Enclavado de una cueva dice la leyenda que fue hogar de un tal Erasmus, conocido como el Robin Hood eslovena, imposible de derrotar durante años y que sorprendía porque nadie podía saber cómo adquirían los alimentos para sobrevivir.
El castillo tiene un paso subterráneo que da al otro lado de la montaña por donde entraban las viandas. Merece la pena visitarlo. Sorprendente su cueva para refugiarse de los ataques.
El bohemio y bucólico Lago Bled
No teníamos demasiado tiempo y el tiempo no era favorable pero no desistimos de ir a Bled. La zona norte de Eslovenia merce un viaje completo y solo. Sus parajes son espectaculares y en invierno, nevados, aún si cabe más.
El lago tiene una isla pequeña en medio a la que se accede con con unas barcas con remeros (la verdad, un tanto caro) . La isla no es muy grande y lo que se hace allí hasta que el remero te trae de vuelta es comer el típico pastel de la zona.
La visita al Castillo de Bled, que data del siglo IX y enclavado en un acantilado de 130 metros de altura, es otro imprescindible, pero no porque haya mucho que ver dentro de él, que es anodino y con poca historia, sino por sus vistas, espectaculares sobre el lago.
En temporada alta, dado que el espacio no es muy grande, habrá que pelear un poco para la foto y contemplar la belleza del entorno. Nosotras tuvimos suerte, sin gente, nos recreamos y disfrutamos de momentos mágicos de silencio.
La garganta Vintgar y los alpes julianos
Estuvimos poco tiempo y fue una lástima, pero eso nos ha invitado a volver a recorrer los alpes julianos que nos dejaron boquiabiertos. Cerca de allí, en la estación de esquí de Straza se encuentra el tobogán de verano. Una lástima no poder montar porque su apertura es a primeros de abril y nos faltaba una semana, pero muy recomendable si vais en esta temporada.
Otro imprescindible es la Garganta Vintgar, que nos pilló cerrada para nuestra sorpresa por derrumbamiento de rocas y árboles por los grandes temporales del invierno.
Así que hay que ir un poco más tarde para encontrarse con todo abierto. Solo pudimos ver un primer pequeño tramo que ya nos dijo lo maravilloso de su interior. ¿Entendéis ahora por qué tenemos que volver?
Es un recorrido de un kilómetro y medio andando, por la garganta, atraviesa por puentes. Un recorrido precioso. Las paredes del cañón excavado por el río Radovna , de aguas cristalinas azules,son de 50 a 100 m de altura.
La erosión de la corriente ha creado muchas piscinas naturales y rápidos. La garganta termina en la cascada Šum, de 13 metros de altura y cuyo nombre significa, literalmente, ‘cascada ruidosa’.
Muy cerca de allí y cerca de la frontera italiana se encuentra el paraíso del queso eslovena, Tomlin. Atravesada por el increíble río Soca, igualmente de aguas cristalinas azules, es un lugar ideal para el turismo activo.Un lugar donde encontrar opciones para practicar kayak, canoa o rafting, además de hidrospeeed en flotador, etc.
El Parque nacional del Triglav y el lago Bohinj
Como no pudimos acceder a la garganta Vintgar aprovechamos para ir hasta el Parque nacional del Triglav, donde se encuentra otro lago tan maravilloso o más que el de Bled, el lago Bohinj, mucho menos visitado y que tuvimos la suerte de encontrar bajo un entorno nevado sin igual.
Nos lo imaginamos en verano, lleno de bañistas, disfrutando de un paisaje como pocos hemos visto. Es un lugar estupendo para pasar unas vacaciones en familia.
Desde aquí sale un teleférico hasta la estación de esquí Vogel, a 1.535 metros de altura. Merece la pena pagar por tener estas vistas. Igualmente lo pillamos cerrado, por lo que aconsejamos el viaje un poco más tarde. No cabe duda de que la zona requiere mucho más tiempo que dos días, así que totalmente dispuestos a repetir viaje.
Triestre, un momento italiano en la ruta
¿Tiene costa Eslovenia? La verdad es que le han dejado un pedacito muy pequeño del Adriatico, con dos pueblos encantadores: Piran, Koper e Izola. Y allí que nos fuimos. Buscamos alojamiento en Trieste (ciudad italiana que nos sorprendió para bien).
Devolvimos coche en Liublina y nos trasladamos en los autobuses Flix. No era la primera vez que viajaba en esta empresa de autobuses, que también está en Francia, pero la verdad es que su funcionamiento en Eslovenia no es muy aconsejable.
¿Por qué? La hora de salida no es respetada y es más bien aproximada. Estos autobuses sufren revisiones continuas de pasaportes en las fronteras y de maletas (lo que no suele suceder en coches particulares), con lo que pueden demorar más de hora y media su salida.
Eso fue lo que nos ocurrió a nosotras que de las 20:15 que era nuestra salida, salimos a las 21:45, más otra media hora de espera en la frontera italiana.. No compensa, son algo más económicos que GoOpti pero merece la pena optar por este traslado particular.
Y llegamos a Trieste. Su entorno y su clima hacen que sea una de las ciudades una de las ciudades más especiales de Italia con un fuerte carácter centroeuropeo e inexplicable que sea una de las menos visitadas.
Situada en el extremo noreste de Italia, en la región de Friuli Venecia Julia Trieste ha sido durante siglos un lugar fronterizo donde distintos pueblos dejaban su huella en elegantes obras de arte históricas, artísticas y arquitectónicas de la ciudad.
Todo lo que tienes que ver te lo dejo aquí y recomendarte que no dejes de ir hasta el castillo de Miramar. Allí alquilamos de nuevo un coche para poder recorrer, no mucho porque no nos quedaban mucho tiempo, la península de Istria.
Callejeamos, comimos, disfrutamos de su clima, de su ambiente, de sus noches elegantes, de sus tiendas con escaparates donde dejarte la vista….De esa Italia costera que tanto enamora y conquista.
El único campo de concentración nazi en Italia
Risiera di San Sabba.
La costa eslovena: Piran, Koper e Izola
La costa de Eslovenia está totalmente estrangulada entre Italia y Croacia, lo que deja escasos 40 km de litoral para el país. Nos decantamos por conocer Piran y Koper y dejamos a un lado Izola para hacer una pequeña incursión en Croacia y ver el espectacular anfiteatro junto al mar de la pequeña ciudad de Pula.
Koper nos sorprendió y nos eclipsó. Tiene mucho encanto y atractivo, tanto en las calles históricas como en la zona más moderna del puerto deportivo. En el casco histórico de Koper destaca la Plaza de Tito, donde se encuentra la Catedral de San Nazario con un gran campanario veneciano.
En la misma plaza destacan el edificio de la Loggia, y el Palacio de los Pretores y de la Armería. Pero lo más importante es callejear sin prisa las calles que rodean esta plaza de Tito y descubrir pequeñas iglesias como la Iglesia de San Nicolás o la Iglesia de la Santísima Trinidad.
Te puede interesar: "Cosas que saber antes de viajar a Eslovenia"
Piran está construida en una península y está formada por un conjunto de calles imperfectas, peatonales y estrechas, con muchísimo encanto. La ciudad necesita su tiempo para observar cada uno de sus rincones. Su plaza más importante es Tartini, una plaza enorme hasta la que entra el mar formando un pequeño puerto para las embarcaciones.
Pula, nuestra pequeña incursión en Croacia
Y como colofón de esta ruta, Pula. Su monumento estrella es el Anfiteatro de Pula, coetáneo del de Roma pero mejor conservado (a veces referido como Pula Arena).
Es uno de los más grandes y mejor preservados del planeta.Si no tenemos demasiado tiempo, una mañana debería ser suficiente para visitar Pula, aunque lo ideal es disponer de un día entero para poder profundizar un poco.
Encaminándonos hacia el centro podremos ver la modesta Puerta de Hércules (s.I) antes de llegar a otra de las visitas imprescindibles de Pula: el Arco de los Sergios (Arco dei Sergi). Y no os cuento más, que para eso están las guías y las auto guías. Solo una cosa más, anotad este viaje en vuestras agendas familiares. Vais a disfrutar mucho y gastar poco.
Te pueden interesar también mis opiniones sobre medios de transportes, alojamientos, atracciones y restaurantes en Tripadvisor
Otros de nuestros VIAJES también te pueden interesar: "Tres días en Oporto" "Nuestro maravilloso viaje al Algarve" "Escocia en autocaravana" "Descubre el corazón de La Toscana" "Costa da Morte, el encanto abrumador del fin del mundo"