Donación de gametos: incesto
No me digas que eres de las que no le has dado vueltas porque no me lo creo.
Una de las cosas que más nos preocupan son el número de personas que han podido nacer del mismo donante y que en verdad no son pocas, porque entre unas cosas y otras, las muestras permitidas aquí en España, las veces que haya podido ocultar sus donaciones el donante o las que hayan viajado al extranjero son unas cuantas…
¿Pero que posibilidades reales hay de que dos personas que compartan genética se encuentren en tiempo, fecha y hora? Porque en algunos pude haber hasta una diferencia de diez o más años, máxime si hablamos de donación de embriones.
Alba dice que ella no se va a levantar todos los días pensando en la remota posibilidad de si se enamora de una persona con la que comparte genética cuando es la misma que la de que le toque la lotería de Navidad… Además, en este familia ya compartimos mucha genética porque los abuelos son primos hermanos y… Y, además, desde que se ha enterado de que solo nos diferenciamos en un 0,1 por ciento con el resto de los humanos, con más motivos…”Si llegase el caso, ya se verá”. Además si todos jugásemos con la verdad, si a todos se nos cuenta nuestra verdad, es algo que sale en la segunda o tercera conversación y evitamos sorpresas.
Yo también soy de las que piensa que hay que vivir el hoy y el ahora…
Mientras que ahora nos parece desagradable e impensable, en otros tiempos era común ver relaciones de incesto. Son varias las antiguas civilizaciones y familias reales que la procreación entre hermanos era habitual. Tan sólo Cleopatra, una de las regentes más reconocidas de la historia, estuvo casada con dos de sus hermanos menores Ptolomeo XIII Theos Philopator y Ptolomeo XIV, y además se especula que sus padres eran hermanos o primos, ya que la dinastía mantenía la pureza a través del incesto.
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